Hacia el final de la dictadura militar y durante los primeros años del gobierno de Alfonsín las mujeres fueron protagonistas. La democracia y las múltiples demandas de democratización social se tradujeron en una revitalización de la participación femenina en distintos ámbitos de la política, entre ellos, el movimiento de mujeres. Desde 1984 la conformación de la Multisectorial de Mujeres y de otras agrupaciones inauguraron un proceso de paulatina e ininterrumpida expansión de demandas enunciadas a partir de la condición de género. Las perspectivas feministas se encontraban en franca circulación en toda la región y las transiciones a la democracia colaboraron con esta tendencia en la medida de que muchas de las demandas podían ser enunciadas en esa clave. En ese contexto, y en múltiples ocasiones, los feminismos y las militancias de izquierda se encontraron y desencontraron. Las tensiones entre “feministas” y “políticas” han sido señaladas en repetidas oportunidades, tanto en testimonios como en trabajos académicos. En especial con relación a las formas y lógicas de organización y sus articulaciones con otras luchas. Sin embargo, esas mismas tensiones ponen de manifiesto el espacio compartido, el territorio común y el deseo de transformación. En esta ponencia nos proponemos explorar la influencia del feminismo en la apertura de las agendas de lucha de las izquierdas partidarias cuando buscaron organizar a las mujeres. En este sentido, buscamos menos relevar qué han hecho las izquierdas en las militancias sobre sus frentes o agrupaciones de mujeres, y más considerar en qué medida el feminismo fisuró algunos marcos de interpretación, lo cual permitió incorporar temas y enfoques novedosos. Para ello vamos a considerar la militancia femenina en cuatro partidos de izquierda de la época: el Partido Comunista (PC), el Partido Comunista Revolucionario (PCR), el Movimiento al Socialismo (MAS) y el Partido Obrero (PO). De esta manera, esperamos aportar al conocimiento de las genealogías políticas de las mujeres tanto como al estudio de las militancias de izquierda en democracia. En este sentido, nuestras hipótesis fundamentales son 1) que los feminismos constituyeron una influencia sobre las izquierdas creando las condiciones para la apertura de cuestionamientos al interior de los partidos, y 2) que la agenda de lucha feminista proporcionó una clave de militancia que permitió la adaptación de las izquierdas al nuevo contexto democrático.