1. Experiencias y resistencias socioeducativas

Educar para la justicia menstrual: relato de experiencias en la escuela secundaria

  • Francia, Analía (Bachillerato de Bellas Artes “Prof. Francisco A. de Santo”, UNLP)
  • Rosenberg, Carolina (Bachillerato de Bellas Artes “Prof. Francisco A. de Santo”, UNLP. Colegio Nacional “Rafael Hernández”, UNLP)
  • Álvarez, Milagros (Escuela Secundaria “J.N. Bialik)
Resumen

Educar para la justicia menstrual: relato de experiencias en la escuela secundaria

Francia, Analia1, Rosenberg, Carolina1,2 y Álvarez, Milagros3
1 Bachillerato de Bellas Artes “Prof. Francisco A. de Santo”, UNLP.
2 Colegio Nacional “Rafael Hernández”, UNLP.
3 Escuela Secundaria “J.N. Bialik”

Compartimos dos propuestas educativas para el abordaje de la menstruación, tema fundamental relacionado con la salud pública y el derecho a la salud, diseñadas e implementadas en dos establecimientos educativos, uno de gestión privada y otro de gestión estatal, con el propósito de promover una gestión menstrual en equidad y salud, en el marco del paradigma de la justicia menstrual y desde una Educación Menstrual Integral que combata el estigma asociado a este proceso y desafíe las nociones binarias de género (Kohen y Rohatsch, 2021).
Desde sus orígenes la Biología ha intentado comprender el mundo natural, pero, como otras disciplinas científicas, ha enunciado, hipotetizado y determinado con un sesgo androcéntrico, señalando como naturales ciertas diferencias entre hombres y mujeres, jerarquizando esas diferencias de modo tal que lo femenino siempre se consideró como inferior a lo masculino, situación que ha sido utilizado para justificar, sobre la base de tal inferioridad biológica, el estatus social de las mujeres (Maffía, 2007). De manera consecuente, la menstruación se enseñó históricamente como un proceso biomédico asociado a la reproducción. Durante años se desarrolló una narrativa respaldada por la comunidad médica y promovida por el mercado, que presentaba al ciclo menstrual como un evento incómodo que se debería esconder y minimizar. Si bien muchas concepciones han cambiado, y ya no se concibe a la menstruación como un pecado ni una enfermedad, la visibilización y normalización del período menstrual ha promovido la idea de que no es necesario interrumpir la rutina cotidiana: existen productos industriales que ocultan toda evidencia del sangrado y que permitir que las mujeres “lleven una vida normal” incluso durante la menstruación. Lo cierto es que, si bien se crearon analgésicos para combatir el dolor menstrual, no se han realizado investigaciones que busquen comprender por completo las causas del dolor, ni siquiera para detectar a tiempo afecciones como la endometriosis (Kohen y Rohatsch, 2021). Es evidente que esta situación no favorece la sensibilización en relación a lo que atraviesa un cuerpo menstruante desde una mirada integral. En acuerdo con las autoras, consideramos que para democratizar los conocimientos es necesario pensar la escuela como un lugar donde sea posible enseñar sobre los cuerpos, la menstruación y la menopausia, en el marco de la ESI, reconociendo y valorando la diversidad. Es importante que el ciclo uterino se enseñe más allá de la reproducción y el sangrado, integrando los contenidos desde la perspectiva del cuerpo como construcción social, entablando un diálogo entre los procesos anatómico-fisiológicos y los significantes culturales, la historia de los cuerpos y las relaciones de poder, las emociones y las experiencias. Creemos que el valor de la experiencia debe aparecer, poniendo en primer plano al placer, la identidad y las emociones cuando se trata de enseñar y aprender sobre la menstruación y desde ese posicionamiento pensamos y llevamos adelante las actividades que aquí compartimos.
Durante el año 2020, en la virtualidad, parte del equipo docente realizó un taller con estudiantes de la Escuela “J.N. Bialik”, en la ciudad de La Plata que abordó la menstruación desde una perspectiva de género y desde su construcción sociohistórica y política. Los objetivos fueron indagar sobre los aspectos biológicos de la menstruación y lo limitante de esta perspectiva, visibilizar la emocionalidad y las pautas culturales frente al ciclo menstrual y conocer distintos productos de gestión menstrual, tomando distancia de la tríada menstruación- mujer- reproducción, comprendiendo que existen otros cuerpxs menstruantes y que, por ende, el menstruar no es sólo cosas de mujeres. El taller se organizó en tres momentos, en el primero se leyeron relatos biográficos a partir de los que se promovió una reflexión personal y se compartieron experiencias sobre los vínculos construidos con la menstruación a partir de las vivencias en sus casas, en los medios e incluso en los correlatos de sentido común, relacionados con la creencia de que menstruar es convertirse en mujer o con la vergüenza que causa mancharse. Para trabajar con el ciclo menstrual, se visualizaron fragmentos de un video que permitió poner el énfasis en la emocionalidad que atraviesa este proceso a nivel individual. En un tercer y último momento se abordó el tratamiento de diversos elementos de gestión menstrual haciendo hincapié en los productos sustentables. El cierre fue con la invitación a reflexionar sobre la frase: La menstruación no es sólo una cuestión biológica. La mayoría de lxs estudiantes vivió el taller de manera incómoda pero necesaria e importante, escuchando, compartiendo su experiencia, sintiéndose habilitadxs a dar su voz, su punto de vista, permitiendo (se) habitar el espacio (virtual) y hacerlo propio (Álvarez y Rosenberg, 2021).
La propuesta desarrollada durante 2023, en el Bachillerato de Bellas Artes “Francisco A. De Santo” de la Universidad Nacional de La Plata, se construyó desde un enfoque metodológico que pretende producir conocimiento a partir de la suma e intercambio de saberes, lejos de una visión positivista que presenta a la salud como un saber producido sólo por la comunidad científica. La materialización de esta propuesta planteó la generación de varias instancias de encuentro, construidos bajo la modalidad taller y a partir del trabajo conjunto de docentes y estudiantes, en el marco de la materia Biología de 2do, 3er y 4to año de la Educación Secundaria. Los propósitos del proyecto fueron propiciar la reflexión colectiva e integral en torno al cuerpo que cambia, su cuidado y la construcción progresiva de la autonomía; profundizar la perspectiva de la diversidad con la intención de visibilizar, problematizar y cuestionar nuestra mirada sobre la realidad, como un paso indispensable para fortalecer la ESI y analizar desigualdades desde una perspectiva interseccional buscando prevenir la reproducción de prácticas educativas discriminatorias, atendiendo al valor que tiene la diversidad en la construcción de sociedades más plurales, justas e igualitarias. Entre los objetivos propuestos consideramos analizar críticamente mandatos culturales sobre las corporalidades; indagar y reflexionar respecto de los aspectos biológico de la menstruación, entendida como un proceso propio de todas las personas con útero y ovarios, y no sólo de las mujeres cis; reflexionar sobre cómo atraviesa la menstruación a las personas con discapacidad; comprender las desigualdades que afectan principalmente a los sectores más vulnerables de la sociedad y las implicancias que tienen en la salud y la educación la falta de acceso a productos de gestión menstrual adecuados; y conocer el impacto ambiental derivado del uso de productos de gestión menstrual no reutilizables.
Para cada curso se plantearon diferentes actividades cuyas temáticas vinculadas a la menstruación fueron definidas a partir de la realización y análisis de encuestas diagnósticas que buscaban conocer los intereses de lxs estudiantes. Las estrategias propuestas en cada instancia favorecieron el intercambio y la reflexión a partir de situaciones disparadoras, habilitando la potencia del debate conjunto. Como cierre de las actividades se invitó a la elaboración de producciones gráficas y audiovisuales como expresión de un relato en sí mismo, que represente la experiencia compartida y constituya una vía de sensibilización y socialización con el resto de la comunidad educativa. Finalmente, se construyó colaborativamente un dispensario autogestivo y comunitario de productos de gestión menstrual para lxs estudiantes de la institución. Como señala Tarzibachi (2018), la menstruación no es solo cosa de mujeres, ni algo estrictamente confinado al espacio de lo íntimo, lo privado. Por el contrario, menstruar también es político.

Bibliografía
- Álvarez, M. y Rosenberg, C. (2021). #MenstruAcción no es sólo cosa de mujeres. XIV Jornadas Nacionales. IX Congreso Internacional en Enseñanza de la Biología.
- Kohen, M. y Rohatsch, M. (2021). Un camino hacia la justicia menstrual. Revista Límbica Vol. II Núm. 2 ISSN 2718-7241.
- Maffía, D. (2007), "Epistemología feminista: la subversión semiótica de las mujeres en la ciencia" en Revista Venezolana de Estudios de la Mujer, vol. 12, no. 28, pp. 63-98.
- Tarzibachi, E. (2018). Sacar la menstruación del closet, Revista Anfibia Recuperado de: https://www.revistaanfibia.com/sacar-la-menstruacion-del-closet